TRES PIEZAS AGRESTES
1
Luces lejos de aquí, tiritan con frío, en el silencio enorme sobre todas las cosas.
Y aquella sensación segura, cálida, asemeja en la distancia las palabras suaves de una ensoñación.
Quisiera derrumbar el temblor, la insensata melancolía de los círculos dibujados en papel.
Y sobreponer la luz sobre los trazos marcados, para que las estrellas tengan un nuevo significado.
Cántame una canción, alguna melodía, que me devuelva el ímpetu, la certeza, sin cavilaciones.
Tal vez así, una mañana, de un día cualquiera, el color y la risa regresen, sobre las parcas ruinas que habito.
2
Aguas lentas sobre el jardín y el movimiento de las hojas de invierno
Este día, aquí, sobrevuela el alma en pensamientos y paisajes agrestes
Dejaré mi pena a vuelo limpio, al cielo en jirones de nubes grises
Cuesta el apego de los descorazonados y el olvido más terco de un pecho herido
¿Puede lo indecible sucumbir al silencio sin siquiera pagar su descaro?
3
Apretado el silencio mastica mi carne
Han muerto las palabras en un lento tiempo
Transformándome en tierra, lapida y lamento
He sido medicina y veneno de mis propias heridas
Y al vuelo de miradas ingratas arrastrado a sus vidas
Olvidando por completo que sigo aquí
Por suerte la tierra devorará mi paso
Como el de muchos viajantes y bestias
Y mi grito pasará al mármol
He existido en un tiempo ajeno
Cuentos y destellos de músicas y risas
Envueltos ellos en los que aún me aman
Cruzaré la estela de la aurora lejana
Sin las ataduras del miedo, el dolor y el hambre
Como si nunca hubiera sido más que ese aprendizaje
Y sonreiré por fin sin temor
Sin postergar, analizar, debatir, llorar
Todo se lo dejaré a ustedes.
A. Collante